Disertación sobre la admiración y la filosofía

¿Qué es la admiración?

Según el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, el verbo "admirar" nos lleva a considerar como extraordinario un suceso, una situación, una persona, etc. Extraordinario es aquello que no es habitual, aquello a lo que no estamos acostumbrados o aquello que, aún no siendo novedoso, nos sorprende por algún motivo.

Dejar de admirar supondría en cierta medida, regenerar  de nuestra condición humana, pues el que no lo hace mostraría la incapacidad para reconocer la belleza, la bondad, la sabiduría y la paciencia. 

Desde mi punto de vista la admiración es un sentimiento que tenemos las personas cuando vemos que algo o alguien tiene algunas cualidades que le hacen ser digno de ella. 

Al reconocer la propia ignorancia y admirar algo, lo que se hace es intentar saber más sobre ello y se despierta el instinto de la curiosidad. 

Según Aristóteles, la filosofía nació de la admiración, lo que llevó a los hombres a filosofar fue el hecho de advertir que la realidad tiene logos, sentido, racionalidad. la realidad misma es admirable porque no es un caos sino un cosmo, es decir, un conjunto ordenado de seres que siguen leyes racionales. 

Supongamos que nos encontramos a una persona anciana que se encuentra desubicada. seguramente, alguien acudirá a ayudarle pero otros muchos, no lo harán.  Esta situación  en psicología se denomina " Efecto de espectador"

Llamamos "Efecto del espectador" a la probabilidad de que una persona intervenga en una situación de emergencia disminuye en función del numero de personas que lo contemplan, es decir si en vez de una muchedumbre solo hubiese  un grupo mas reducido de personas, probablemente, la persona afectada hubiese recibido mayor atención. 

Cuando una persona socorre a otra que necesita ayuda, los demás componente que se encuentren a su alrededor sentirían admiración, pero sentirían un tipo de admiración que se llama "Admiración estéril" ese tipo de admiración es por un periodo de tiempo corto, por lo tanto no debería llamarse admiración como tal.  En cambio, otras personas se preguntarían porque no han ayudado si en el fondo querían hacerlo. Adelantarse en la búsqueda de respuestas a esas preguntas otorgará a la admiración en su sentido pleno. 

Todos estos pensamientos nos llevan a filosofar, dejando que la admiración nos inunde, enseñandonos como si de alumnos se tratase. Filosofar lleva a cuestionarse los porqués de aquellas situaciones que nos sorprendan. y nos hagan sentir participes de ellas.